Título: El honor de los corsos
Autor: William Heffernan (1940-)
Título original: Corsican honor (1991)
Traducción: Aníbal Leal
Editor: Javier Vergara Editor (Buenos Aires)
Fecha de edición: 1993-06
Serie: Novela de intriga
ISBN: 978-950-15-1311-0 (950-15-1311-4)
Estructura: 1 prólogo, 49 capítulos, 1 epílogo
Información sobre impresión:
Esta edición terminó de imprimirse en VERLAP S.A. -
Producciones Gráficas, Vieytes 1534 - Buenos Aires - Argentina, en el mes de junio
de 1993.
Información de cubierta:
Tendría que pactar con la mafia. Sólo así la vendetta sería
posible.
Información de contracubierta:
William Hefferman, autor de Rosas de sangre y Tolteca nos
lleva a un fascinante y mortífero mundo en donde una familia de espías
americanos se ve atrapada en las pérfidas maquinaciones de la mafia corsa. Alex
Moran opera en la agencia de defensa e inteligencia y es hijo del legendario
agente de la CIA Piers Moran. Está destinado en la capital del crimen,
Marsella. Ernest Ludwig es el más temible terrorista en Europa, una máquina
humana de asesinar, cuya fría inteligencia, infinita fuente de recursos y su
marginalidad a las reglas lo han hecho invencible.
Estos hombres son los dos polos de una novela que va desde
las discos en Alemania a los burdeles en Marsella, desde las montañas de
Córcega a las selvas de América Central, desde los country-club de Palm Beach a
los pasillos del poder en Washington.
Para Alex, la ruina de Ludwig es más que un desafío
profesional. Es una furiosa venganza personal hacia quien años atrás había
destruido a su hermosa esposa. Ahora, una década más tarde, Ludwig ha aparecido
otra vez, trabajando con sus viejos métodos sádicos y sanguinarios. La mafia
corsa está obligada a ayudar a Alex a atrapar y destruir al terrorista. Una
guerra encubierta se desata entre estos dos bandos, una en donde no existen
límites para la traición y el terror y donde la llave para sobrevivir está
escondida en un laberinto de mentiras.
Información de solapas:
“Alex se recostó en su
sillón. Se dijo que era hora de ir a las cosas importantes.
—¿Qué sabe de Ernst
Ludwig? —preguntó Alex.
Blount frunció el
ceño, y comenzó a recitar de memoria. —Terrorista alemán, de alrededor de
treinta años. Nació en Aquisgrán. El padre, un veterano comunista que emigró a
Berlín Oriental cuando Ernst tenía cinco años. Educado en Berlín Oriental y
Moscú, entrenado como terrorista en Libia. Habla todos los idiomas europeos
importantes, además del ruso, el inglés y el árabe. Se supone que es el jefe
del grupo terrorista denominado Fracción del Ejército Rojo que asumió la
responsabilidad por la bomba puesta en la discoteca de Wiesbaden hace tres
semanas. Sólidos vínculos con la Stasi de Alemania Oriental y sus colegas
libios; pero prefiere trabajar independientemente, como una especie de
francotirador.
Blount miró expectante
a Alex después de terminar. Lo siento, amigo, pensó Alex. Aquí no distribuimos
medallas de oro.
—¿Sabe por qué no
tenemos una fotografía o una descripción física de este canalla? —preguntó
Alex.
—La carpeta decía que
mató a todos los agentes que lo vieron. Alemanes. Franceses. Algunos de los nuestros.
—No olvide esa parte
—dijo Alex, y su ojo izquierdo se entrecerró levemente—. Usted saldrá a
buscarlo. Lo mismo que el resto de nuestro grupo. Es la única tarea que tenemos
en este momento. Nos han arrojado a una caldera de presión y ordenado que lo
encontremos, y que lo hagamos de prisa, antes que otros. Antes de que salga de
Europa y se refugie en un baluarte árabe, donde no podremos encontrarlo. De
modo que trabajaremos fuerte. Muy fuerte. Pero no quiero que nadie vuelva a
casa en una caja.”
William Heffernan, ex periodista, es un autor norteamericano
de mucho prestigio. Su especialidad son los thrillers —novelas policíacas— en
los que maneja con absoluta maestría y minuciosidad complejas tramas y
personajes que ejercen una verdadera fascinación sobre el lector.
Sus obras anteriores —El corso, Actos de contrición, Tolteca
y Rosas de sangre, ya publicadas por esta editorial— han obtenido un rotundo
éxito y han sido traducidas a varios idiomas.
MI COMENTARIO:
1980. El agente de la CIA Alex Moran se enfrenta en Marsella
a Ernst Ludwig, terrorista alemán al servicio de la KGB. Ludwig viene de hacer
volar una discoteca en Alemania. Moran tiene una fuerte relación, semifamiliar,
con los hermanos Antoine y Meme Pisani, jefes de una familia de mafiosos corsos
que maneja el submundo criminal en el sur de Francia. Esa relación la heredó de
su padre, Piers Moran, agente de inteligencia estadounidense que aseguró la
colaboración de su país con criminales franceses e italianos para detener el
avance del Partido Comunista luego de la Segunda Guerra Mundial, además de embolsillar
una fortuna. Ludwig se muestra letal e invencible: mata a una chica que conoció
casualmente, a un compañero de Alex y finalmente, a su esposa Stephanie, quien
recientemente le había sido infiel. Moran decide vengarse, pero los negocios de
su padre Piers se mezclan con los intereses del espionaje, y desde la CIA le
vetan cualquier revancha. Alex termina dando clases en una universidad de
Estados Unidos, hasta que, a principios de los 90, vuelve a entrar en acción.
La novela tiene tres partes: la primera, que ocurre en 1980
y cuenta el desastroso encuentro de Alex y Ludwig; la segunda, que retrotrae la
trama a la Marsella de posguerra, mostrando el trabajo allí de Piers Moran y su
pacto con los Pisani; y la tercera, ambientada en 1990, con un señor de la droga
colombiano buscando penetrar en el negocio europeo, utilizando para ella a un
envejecido pero aún fuerte Ludwig. Heffernan es un narrador tranquilo, seguro
de lo que cuenta y capaz de brindar momentos tanto románticos como brutales. Hay
varias escenas muy gore, de tortura, violación y muerte que rompen con cierta
parsimonia que preside el relato. La primera parte está bien; la segunda es la
mejor, metiéndose en el terreno del recuerdo y de la fundación de una época (la
colaboración anticomunista entre la CIA y la mafia corsa); la tercera parte es la
que flojea, quizás porque no hay más sorpresas y uno puede prever las cosas que
pasarán. Una novela interesante para los que gustan de historias de mafiosos.